Una de las situaciones que más alarma a las parejas que están deseando ser padres es la aparición de formas anormales de espermatozoides cuando se realizan un seminograma. ¿Es realmente tan importante la forma del espermatozoide?
En el análisis del semen para conocer la capacidad de fertilidad del mismo se mide la concentración de espermatozoides por ml, el volumen de eyaculado, la movilidad de los espermatozoides y sus formas. Curiosamente en el apartado de las formas se hace una descripción muy pormenorizada sobre si las anomalías son de la cabeza, la cola o la pieza intermedia, anotando sus porcentajes. Esta descripción junto con el nivel bajo de formas normales preocupa profundamente a la pareja que realiza el seminograma como primera aproximación a su potencial de fertilidad.
El pensamiento de la pareja que recoge este seminograma con bajo porcentaje de formas normales, es el de que la posibilidad de ser padres es nula y que si ocurre el niño tendrá múltiples anomalías. Afortunadamente esto no es así.
Los porcentajes de normalidad, según la OMS, en un seminograma han ido bajando progresivamente, desde los 50% de 1987, pasando por 30% en las guías de 1992, 15% en las guías de los criterios estrictos de Kruger en 1999 hasta el 4% de las guías actuales de 2010. No está demostrado que las formas anormales tengan una relación con anomalías genéticas. Si está relacionado obviamente con la movilidad de los espermatozoides.
Sin embargo, un estudio de 2017 de Kovac con urólogos de la Universidad de Virginia y del Baylor College de Houston publicado en el Asian Journal of Andrology ha concluido que varones con una completa ausencia de formas normales presentan altas tasas de éxito reproductivo sin necesidad de técnicas de reproducción asistida.
Sin duda los más importante para valorar la capacidad de fertilización de un hombre no sólo es valorar datos aislados de un seminograma, es el conjunto de todos ellos junto con una adecuada historia clínica y una exploración física adecuada, lo que nos va a permitir emitir un pronóstico de fertilidad y lo que es más importante orientar sobre posibles tratamientos tanto para concebir de forma natural, como con técnicas de reproducción asistida.