La presencia de patologías medulares (traumatismos medulares, espina bífida) así como alteraciones neurológicas de afectación general (esclerosis múltiple, polineuropatías) puede mermar el desarrollo de ciertas actividades físicas, pero eso no debe llevar a estos pacientes al abandono de sus deseos sexuales.
El desarrollo de estas patologías en algunos casos provoca en los pacientes conductas de evitación al no estar a gusto con su cuerpo, por la creencia de que no podrá dar placer a su pareja o simplemente por que no se atreve a dar el primer paso.
Parejas en que uno o los dos miembros tiene alguna discapacidad también nos preguntan sobre su capacidad de tener hijos, sus riesgos y sus posibilidades.
Desde la Unidad de Medicina Sexual podemos intervenir tanto en los aspectos físicos como psicológicos de este tipo de pacientes así como asesorarles en los temas relacionados con la reproducción.